Primer Paso después de la Salvación: el Bautismo Bíblico

El Bautismo Bíblico requiere:

1. Un Candidato Bíblico

  • Un creyente, es decir que es un verdadero discípulo del Señor (Mateo 3:7-8), alguien que se ha arrepentido de sus pecados y ha recibido a Jesucristo como su Señor y Salvador.

2. Un Modo Bíblico

  • La inmersión completamente en agua y no de ninguna otra forma. (Juan 3:23) El Bautismo nos muestra la muerte, la sepultura, y la resurrección de Cristo.

3. Un Motivo Bíblico

  • El propósito es ser obediente como discípulo de Cristo, para glorificar a Dios y mostrar a todo el mundo que hemos sido salvados, redimidos y nacidos de nuevo. ¡No es para aumentar nuestra salvación! (Hechos 2:41)

4. Una Autoridad Bíblica

  • Las Iglesias locales nuevotestamentarias son las únicas autorizadas para bautizar. (Mateo 28:18-20) Una iglesia puede elegir un representante que puede bautizar, puede ser un pastor, un misionero u otro hombre autorizado quien no necesita ser necesariamente un ministro ordenado.

Cómo Crecer Después de Salvación

Cuatro ingredientes necesarios para crecer en el Señor. Son necesarios para tener un discipulado Bíblico.

¡Lo que Jesús nos enseñó en Juan 15!

1.   Vamos a cultivar una vida de oración.

  • “Si permaneciereis en mí, y mis palabras permanecieren en vosotros, todo lo que quisiereis pediréis, y os será hecho.”   Juan 15:7
  • “No me elegisteis vosotros a mí; mas yo os elegí a vosotros, y os he puesto para que vayáis, y llevéis fruto; y vuestro fruto permanezca;  para que todo lo que pidiereis al Padre en mi nombre, él os lo dé.”   Juan 15:16

2.   Vamos a leer y crecer en la Palabra de Dios, la Biblia.

  • “Ya vosotros sois limpios por la palabra que os he hablado.”   Juan 15:3
  • “Si permaneciereis en mí, y mis palabras permanecieren en vosotros,
    todo lo que quisiereis pediréis, y os será hecho.”   Juan 15:7
  • “Si guardareis mis mandamientos, permaneceréis en mi amor: como yo también he guardado los mandamientos de mi Padre, y permanezco en su amor.”   Juan 15:10
  • “Vosotros sois mis amigos, si hiciereis las cosas que yo os mando.”   Juan 15:14

3.   Vamos a contar a otros lo que Dios ha hecho por nosotros y apoyar a otros para ser salvos. 

  • “Todo pámpano en mí que no lleva fruto, le quita;  y todo aquel que lleva fruto, le limpia, para que lleve más fruto.”   Juan 15:2
  • “Permanecéd en mí, y yo en vosotros. Como el pámpano no puede llevar fruto de sí mismo, si no permaneciere en la vid, así ni vosotros, si no permaneciereis en mí.”   Juan 15:4
  • “Yo soy la vid, vosotros los pámpanos: el que permanece en mí, y yo en él, éste lleva mucho fruto (porque sin mí nada podéis hacer.)”   Juan 15:5
  • “En esto es glorificado mi Padre, en que llevéis mucho fruto;
    así seréis mis discípulos.”   Juan 15:8
  • “No me elegisteis vosotros a mí; mas yo os elegí a vosotros,
    y os he puesto para que vayáis, y llevéis fruto; y vuestro fruto permanezca;  para que todo lo que pidiereis al Padre en mi nombre, él os lo dé.”   Juan 15:16

4. Vamos a congregarnos juntos en una iglesia local para amar y animarnos unos a otros.

  • “Yo soy la vid, vosotros los pámpanos: el que permanece en mí, y yo en él, éste lleva mucho fruto (porque sin mí nada podéis hacer.)”   Juan 15:5
  • “Este es mi mandamiento: Que os améis los unos a los otros, como yo os amé.”   Juan 15:12
  • “Esto os mando: Que os améis los unos a los otros.”   Juan 15:17
  • “Y vosotros también daréis testimonio, porque estáis conmigo desde el principio.”   Juan 15:27

¿Llamado por Dios y después encarcelado?

Hechos 16:11-40

Es muy interesante a mi que casi inmediatamente después de recibir el llamado de Macedonia, encontramos Pablo y su compañero Silas en una cárcel en cadenas, después de ser azotado muchas veces.  Pero no encontramos a ellos preocupados de la mañana o enojados por causa de sus dolores o por ser maltratados injustamente o por ser entregado a una cárcel por medio de  hombres codiciosos de ganancias deshonestas.  Encontramos a Pablo y a Silas a medianoche, orando y cantando himnos a Dios.  

¡Ellos Cantaban a Dios!  
¡Todos los que estaban presos los oían!

Ellos no se fueron a Filipos para visitar o tener una vacación.  Son siervos de Dios buscando su voluntad en todo.  En medio de las problemas ellos todavía estaban compartiendo Cristo.  Si ellos no escuchaban al llamado para ir y si no había traspasado así todas las cosas, el carcelero, su familia y todo los presos no tenían oportunidad para escuchar como ser salvo.  

¿En su vida ahora, cual cosas está usando Dios para recibir gloria en maneras que a nosotros no son óptimos o no son nuestras preferencias? 

Recuerda que si Dios ha llamado a usted, el va a apoyarle para cumplir el propósito que el tiene.  

¡Al fin, Dios va a recibir toda la honra y toda la gloria!